Conocemos la ley de la palanca conocida como la ley de oro de la mecánica. En el universo y en la física, todo se compensa, así en la ley de la palanca al brazo más largo corresponde menos fuerza y al brazo menor corresponde más fuerza, se compensa; lo que se pierde en fuerza se gana en longitud y viceversa. Ahora, en el experimento de las campanas en un kilómetro de distancia que digo en el libro “El Misterio de la Existencia” 2do., explicaré como es nuevamente para el entendimiento del lector:
En una distancia de 1,000 dividimos en 3 como se ve en la figura; en A, digamos, y en B otra campana que tiene otro sonido particular B, en E hay un espectador que escucha los sonidos de las campanas y en T otro espectador. La campana A suena primero y después de un segundo suena la B, luego el espectador E escucha primero la A y después de un segundo la B, se comprende. Ahora, cuando el sonido de la A, a la velocidad de sonido 333 metros por segundo llega a E, recién suena la B, y cuando el sonido de la A está en el punto E suena la campana B, y cuando el sonido de la A está en B, ya el sonido de la B está en T, entonces este espectador escucha primero la B y después de un segundo la A, al contrario de E, que no es la realidad. Pero intervine la compensación: la distancia de A a T es tres veces más que la de B a T, luego el sonido de la A es más tenue (tres veces) que la de B, así se compensa, lo que gana la B en llegar primero a T pierde en tocar después que A, y esta que gana en sonar primero pierde en fuerza su sonido.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario