Ya conocemos, si estamos en un ómnibus caminando y frena este, nos vamos para adelante, y esto es como que “queríamos” estar como estábamos, o sea moviéndonos para adelante como nos llevaba el vehículo, y esto a causa de una fuerza que se comprende es la inercia, empero esta fuerza también podemos decir es como la fuerza de la costumbre, luego la costumbre es como una inercia. Si estamos acostumbrados por ejemplo, a levantarnos en la mañana a las 7, es difícil levantarnos más temprano o más tarde; luego influye la inercia en lo humano. Y por eso también, cuando estamos en el ómnibus caminando, el chofer frena despacio para que nos vayamos para adelante con fuerza y nos choquemos en el ómnibus y entre todos; esto es pues porque hace así el chofer para que nos acostumbremos del movimiento al reposo igual que nos acostumbramos poco a poco a cualquier cosa. Y al acostumbrarnos al reposo no sentimos casi el cambio del movimiento a lo quieto, no vivimos ese cambio, entonces se entiende que el cambio es vida; por eso el movimiento del ómnibus no es movimiento sino reposo, luego no es cambio, no es vivir. Así se van componiendo los entes: inercia, reposo, éter, coordenadas, centro, costumbre, no sentir, no vivir.
Y como lo que se manifiesta es lo que se siente, nos acostumbramos, por ejemplo, al frío, y ya no sentimos frío, así también interviene la no manifestación en esto de la inercia respecto el vivir.
La fuerza de la costumbre es muy grande, por eso es difícil quitarse los malos hábitos: fumar, el alcoholismo, etc. Ahora, si uno se acostumbra, por ejemplo al ruido de un motor de luz eléctrica que existe cerca de su casa, ya su oído “no siente” ese ruido y así por la costumbre se vuelve silencio, o sea nada; es igual que se vuelve reposo, es como una inercia, ya no le molesta ese ruido, está acostumbrado. Si ese hombre tiene un gusto al silencio, ni la música le gusta, cuando se encuentra en una casa donde no hay motor de luz, siente un gran placer, entonces se hace relativo el silencio o el reposo o lo neutro: en la casa donde no hay motor de luz hay más silencio para ese hombre, empero, como escribo en mi libre E.M.d.l.E 2do. Sobre el antirruido, ese más silencio puede cambiar a una especie de ruido: el antirruido, y esto es como un conducto a otro mundo, así como puede ser el infinito chico que expliqué en Otra Dimensión.
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