LA VIDA

Hemos visto en el subtítulo o título de La Voluntad, que todo tiende a existir, por ejemplo, se ve un balde color amarillo y al ver a otro lado se ve al balde como visión pero color violeta, todo tiende a existir, quiere existir, sino al mirar a otro lado no se miraría el balde sino el sitio y su color, nada respecto el balde.

Todo tiende a existir, y por tanto ¿es como la inercia que tiende a seguir existiendo? El balde quiere seguir existiendo y aparece en el otro lado (pero de color opuesto), ¿será color opuesto como la ley de la reacción?


Todo existe, todo vive: si un hombre está sentado descansando, sin hacer nada, siempre vive, está pensando, recordando, ¿Qué piensa? ¿Qué recuerda? ¿De dónde vienen esos pensamientos? ¿Quién le hace pensar? Vienen del subconsciente los recuerdos, empero, ¿quién escoge los recuerdos y los pensamientos? Lo mismo, cuando se sueña, ¿quién le hace soñar? Vienen del subconsciente, del inconsciente y del ante-consciente, pero ¿quién escoge? Se comprende que es de una voluntad, será la voluntad de la vida; todo viene de una voluntad, que hace la fuerza y esta el movimiento, y el movimiento es vida. Como el instinto es una voluntad, esa voluntad de vivir será pues un instinto porque el hombre no vive porque quiere, es pues de la naturaleza, de la Existencia, entonces de Dios. Y los animales también a veces están sin hacer nada, ¿piensan? Si no tienen alma no piensan, es como si fueran robots, y si piensan su pensamiento será reducido. ¿Y los animales que “duermen” largo tiempo como el lirón y el murciélago? Prácticamente están “muertos” durante ese tiempo, y las hormigas o los insectos ¿tienen alma? ¿Tienen conciencia? O son simplemente máquinas complicadas; y si piensan según la ley de la Unidad no son más que máquina, no tienen alma, luego no existen. ¿Acaso el hombre ha vivido en el cuerpo de un animal para decir que piensan o tienen alma? Ahora, pensemos, la vida es más grande en el hombre, mucho más grande, que en el animal, aún si este piensa, es sólo una manifestación para el hombre, que vive, es el que vive en el cuadro de la Existencia. Pues todo tiene su razón y su voluntad, y su objeto, por tanto ¿por qué y para qué la vida? ¿Hay razón pues en la existencia? ¿Para qué y por qué la existencia y Dios? Hay razón y voluntad; hay pues primero espíritu, hay primero Dios y hay objeto en la vida: el hombre, el alma, nosotros los humanos, hechos a semejanza e imagen del Creador. Así en la vida, la existencia y el mundo es necesario Dios, sino nada existe.