EL ALMA

Conocemos de que el espíritu se compone de razón y voluntad, por tanto el alma se compone de esos entes. En mi primer libro “El Misterio de la Existencia”, explico sobre el premún que es un ente que existe con el alma y el mundo, es o fue presente; por ejemplo se mira una casa verde y se piensa en esa casa en su color, en su forma, luego es existencia que vivimos en ese momento, presente, consciente pasa al subconsciente, esa existencia es el premún, o si se piensa que un tal hizo un acto de heroísmo, digamos, eso también es un premún porque existió igual que la casa verde. En el subconsciente existen “infinidad” de premunes, y en el sueño, el orden de ellos según lo consciente, la ubicación, la conformación, en el sueño se desordenan, se mezclan, así por ejemplo existe en el sueño un hombre mezcla de dos amigos.

Si no existiera la inmortalidad del alma, sería como todo existe y aún muere todo: la existencia, muere uno muere el alma, ya nada existe, muere también la existencia. Este concepto es pues según USASE (Una sola alma existe), todas las demás almas no existen sino son sólo manifestación: “Nadie sabe que el ser que percibimos es ser, máquina o visión, sólo sabemos que el ser que somos es ser”, entonces la existencia sería como un sueño: en el sueño existen seres con quienes tratamos pero no existen realmente. En el tratado sobre La Vida manifiesto: todo tiende a existir, es una constante tendencia, por tanto una constante voluntad, perenne voluntad, es la Existencia, y esto no puede existir; nosotros existimos y según USAE nunca pues moriremos, somos la existencia, sólo cambiamos de mundo: en los sueños, en la muerte. Si no habría inmortalidad, simplemente no habría existencia. Cuando una persona está anestesiada, por ejemplo, durante dos horas, no vive, no existe, pero respecto la relatividad del tiempo siempre existe como vimos en El Tiempo. El alma es pues inmortal.